Noche de jugueteo [Antonio]

Me era común estar por estos lugares, ya que las mujeres más fáciles de cazar, eran aquellas que se entregaban a mi por el hecho de darles unas cuantas monedas. Para mi no era muy difícil pagar por estos "servicios". Al fin y al cabo, lo hacia por diversión, y aprovechaba de que mi virilidad estaba más que activa cuando bebía la sangre de estas féminas, ellas creían estar en el cielo, pero por su trabajo, si así se podía decirle, no les llevaría exactamente a un paraíso lleno de ángeles. Aunque nunca fui creyente, menos si era un ser "inmortal", me reía al escuchar aquellos predicadores, los curas, y todos aquellos que confiaban en que serían ángeles de su "Dios", solo por rezarle los domingos y confesando todos sus pecados.

Me dediqué a elegir a la mujer más bella, la dueña ya me conocía, y era consiente de que yo podría pagar hasta por la puta más cara, con tal de cumplir mis caprichos, después de todo, vivía de cumplir caprichos, no me quedaba nada más que hacer después de 300 años y más. Llamo a todas sus "niñas", presentándome a las nuevas trabajadoras de este mes, ya que, por alguna razón, siempre alguna terminaba muriendo. Reí internamente, debía ser dificultoso tener que conseguir tantas mujeres cada mes.

Comencé a caminar en linea recta, revisando con la mirada a las chicas, que me miraban coquetas, sin siquiera saber para que las quería. Relamí mis labios y decidí quedarme con una colorina, de piel blanca como la nieve, ojos azules, y sus labios pintados de un rojo intenso.- Se ve simplemente apetitosa mon cherie... le gustaría pasar la noche conmigo? .-Dije ofreciendo mi mano para que me acompañara, y esta la tomo susurrándome.- A un justo precio, claro~ .-Me sonrió, dejándome ver su blanca dentadura. La llevé al cuarto, cerrando la puerta mientras veía como aquella mujer se recostaba en la cama, comenzando a despojarse de su vestido.

Comencé a caminar por aquella fría noche, me sentía extraviado y perdido, nunca antes había estado por aquellas calles, podía observar mujeres vestidas provocadoramente, solo algunas...¿como había llegado aquí?
Dí algunos pasos hacia adelante , gire mi cabeza un par de veces intentando ubicarme para regresar donde mis familiares que estaban en la carpa, pero sin duda eso se encontraba muy lejos de donde yo me encontraba, giré en una esquina y vi un rostro familiar saliendo de lo que parecía un local...¿sexual? Sí, creo que eso era, luego me dí cuenta que se trataba de Francis ~ me detuve sorprendido de toparmelo por aquí.

Luego de haber saciado mi sed tanto sexual como sangre. Dejé a aquella mujer en la cama, acostada como si estuviera durmiendo, y tapándola con las sabanas que eran poco utilizadas en este lugar. Me dispuse a vestirme sin mucho apuro, para claro, dejar unas monedas de oro en el pequeño y maltratado mesón que había en la habitación. A pesar de que había matado a la mujer, debía pagar sus buenos servicios.

Decidí retirarme aunque con la mayor tranquilidad del mundo, la noche era joven y tenía bastante tiempo para hacer lo que se me diera en gana. Me despedí de la dueña del burdel y crucé la puerta, para luego de caminar unos pasos, percatarme de que los ojos de una persona me seguían. Me escabullí rápidamente para que esta persona de vista, y luego aparecí a sus espaldas, acercándome a su oído y cuello, pero... esto me era demasiado familiar, era indudable, mi querido juguete era aquel espía.- Que haces por estos lados solo, mon amour? -. Susurré en su oído, acariciando su brazo para que este se diera cuenta de mi presencia.

Un escalofrió recorrió toda mi espalda, asustado pegué un pequeño salto y me gire de inmediato quedando frente al rubio. Fruncí un poco el ceño, el continuaba llamándome así ''mon amour ~'' dudé un poco antes de contestarle pero me decidí a hablarle firme, despues de todo ya habia pasado tiempo desde que nos conocíamos. ¿Tantos años y aun no recuerdas mi nombre Francis? me llamo Antonio y...creo que me perdí. . Sonreí avergonzado, ¿como podia haberme perdido? se supone que yo conocía este lugar, tanto tiempo caminando por las calles y ahora me pasaba algo como esto. ¿y tu? ¿te divertiste?.

Me pareció adorable el hecho de que el chico estuviera perdido, pero era peligroso, al final, era un humano, y podían matarlo al menor descuido, podrían quitarme su preciada sangre.- Que va~ Antonio Fernandez Carriedo, crees que no se nada de ti? .-Coloqué mi mano en su espalda, para que avanzara junto a mi a pasear por el pueblo, conmigo estaba más seguro que solo y encima, perdido.- Divertirme? Claro, además de que todos tenemos necesidades biológicas, no cherie? Oh, acaso estas celoso? .-Bromee, mientras buscaba la mirada de sus hermosos ojos color esmeralda.

Mientras caminabamos lo mire directamente, sus ojos eran tan azules, uno lograba perderse en la profundidad de ellos. ¿Celoso? Sonreí, Si Francis, estoy que me muero de los celos, parecen consumirme~, Respondí sarcástico. Disculpa, ¿Por donde andamos y hacia donde nos dirigimos? ~ no se que me pasa, aún no me ubico. La verdad aún no conseguía ubicarme por esas calles, y no podía explicarme el porque.

Tenemos tres posibilidades~ Perdernos por el bosque hasta que amanezca, ir a mi humilde hogar, o que vaya a dejarle hasta su carpa... Es libre de elegir su destino, querido Antonio~ .-Caminamos hasta llegar al limite del pueblo con el bosque y un camino. De cualquier manera, eligiera lo que eligiera, le vigilaría toda la noche, ya que debía asegurarme de que no le pasara nada mientras yo pudiera cuidarle. Me coloqué frente a él, sonriendole de manera dulce.

Volví a perderme en aquellos ojos que algo tenían, no era su profundo azul, osea, eso solo era en parte, pero había algo oculto en aquellos ojos, algo que quería descubrir, mi intuición me decía que algo había detras...Pasaron unos minutos hasta que reaccione y respondí a su pregunta. Llevame a mi casa...Mañana debo trabajar, además de que mi pobre madre debe estar preocupada , Sonreí recordando la hermosa sonrisa de mi mamá, de seguro estaba inquieta por no haber llegado aún.
¿Hasta que hora piensas quedarte tu en la calle? ya es bastante tarde.... Suspire mientras miraba hacia otro lado.

Entonces vamos por el bosque, es la forma más corta... .-Sonreí mientras caminaba y me acordaba de su madre, podría decirse que Antonio era totalmente igual, solo que con cuerpo de hombre. También recordé que por poco y la había matado por saciar mi sed, pero ese no era tema ahora, por suerte, no había pasado.- Yo me quedaré toda la noche despierto, me gusta la noche... pasear... .-Suspiré aún con una sonrisa en mi rostro, ya que el gitano no sabía que la noche era mi única instancia para "hacer algo", pero a la vez, no tenía nada que hacer, era un tanto aburrido, se sentía muy solitario, pero era lo que me había tocado.- Deberías tener cuidado cuando andas de noche por acá, en el pueblo cada vez hay más muertos... .-Lo dije con relajo, por lo menos, sabía que la mayoría de las muertes eran mi culpa, y no le haría nada a él, pero... no faltaba la gente que mataba por gusto, o por razones que ni yo sabía

¿Muertes?...Sí, he oido algunos comentarios ~ pero vale, que se defenderme de cualquiera que quiera atacar, no importa quien sea, no me dejaria matar tan facil Sonreí mientras caminaba con el rubio por aquel espeso bosque, la bruma comenzaba a aparecer y la noche se tornaba más fría...Además no salgo por estos sitios, a lo más voy por las noches a la laguna, pero ese es un camino que me se de memoria, la verdad no entiendo como llegue hasta los burdeles, aunque no me sorprendio del todo encontrarte allí Volví a sonreir... Pensé que tenias más éxito con las chicas, es solo mirarte la facha de galán ¿verdad?

Si es por eso, puedo acostarme con la mujer que desee, esta sea aristócrata o pueblerina, pero requiere un juego de seducción, y hay veces en donde un hombre debe hacer lo que debe, no crees? .-Reí mintiendo, realmente hacía ese tipo de cosas cuando mi sed era muy grande, ya que a veces no tenia tiempo de cazar por variadas razones, aunque, claro, lo primero era verdad.- Y dime Antonio, tu y tu madre están bien? no necesitan nada?

Lo mire un poco molesto por el ultimo comentario, aunque sabía que no lo habia dicho con malas intenciones ~ Claro que estamos bien, el otro día asalte con unos amigos unos almacenes, el dinero y la mercancía claro esta, Así le compre un lindo collar de gemas a mi madre y nos alcanzo toda la semana el dinero, mañana veré que más puedo robar ! Dije en un tono altamente Sarcástico, luego suspire...Gracias por preocuparte Francis...pero tu sabes que puedo arreglarmelas solo, todo limpiamente ~ en el ultimo caso me prostituiria antes de pedirte algún favor o hacer que te preocuparas por esas cosas Reí fuerte por la ultima broma. Tranquilo.. Sonreí mirandole a los ojos.

Me preocupo y me seguiré preocupando. .-Dije con voz firme, para luego notar mi leve enojo, porqué? No sabía, este chico me hacía pasar por muchas emociones en pocos segundos, me confundía bastante. Le miré y reí por lo de la prostitución.- Oh, pues ya tienes el primer cliente si es que llegas a hacerlo, no vaya a ser que te consigas a un viejo gordo, canoso y horripilante~ .-Le guiñé el ojo y abracé por el hombro.- ... Recuerda que si no lo recibes tu, se lo daré a tu madre, y si no me lo recibe ella, regresa en regalos que aparecerán en tu carpa .- Dije mientras le guardaba en el bolsillo trasero un fajo de billetes-.

Prostitución....hahaha Volví a reir con el solo hecho de imaginarmelo. Luego sentí su brazo en mi cuello, su brazo no era como podría decirse...''calido'' pero no me desagradaba aquella temperatura, pero en si el hecho de aquel tipo de ''abrazo'' era extraño. Luego senti su mano deslizarse por el bolsillo trasero de mi pantalón...¡YA TE DIJE QUE NO QUIERO TU DINERO! FRANCIS... Cuanta rabia me daba, le grite tirando el fajo de billetes a la tierra humeda del bosque, por lo menos nadie podía oir mis gritos de enfado contra el rubio. No es como si me juntara contigo por tu dinero, me haces sentir terrible!

Suspiré y dejé el dinero botado, tomé a Antonio del brazo, llevándolo hasta un árbol y colocandolo contra él.- Se que no te juntas conmigo por él dinero, pero no me gusta que no puedas cumplir tus necesidades básicas.-Le miré a los ojos, acercándome a su rostro. Podría beber su sangre ahora mismo... no, no debo, no lo haré. Me dije en la profundidad de sus bellos ojos. Pero porqué no? para eso lo cuido y mantengo, no? O tal vez... es otra cosa? ... Acaricié su cuello y luego su mejilla, y luego me aleje dos pasos hacia atrás.- Bueno, entonces, el dinero no pasará por tus manos, pero lo recibirá tu madre.- Me crucé de brazos, mirándole aún.

Me asuste un poco por el contacto, aprisionandome contra aquel arbol, sentí un poco de temor...¿temor? como era posible, el era exactamente igual a mi, ¿o eso aparentaba?...no podía dejar de mirar sus ojos azules...
Yo se que tu algo ocultas...por tu mirar..., susurre casi inaudible, luego lo vi alejarse unos pasos de mi, cruzandose de brazos y diciendo cosas como esas...
Haz lo que quieras, pero no quiero aceptar tu dinero, porque no tengo porque, solo somos amigos y tu no me debes nada Respondí firme, aunque sentia algo de tristeza, no se porque, era algo en mis palabras...

Ocultaba algo? Si que lo ocultaba, y esperaba que nunca lo supiera, sino, se alejaría de mi y... pero, porque me preocupaba si se alejaba? solo debía beber su sangre y ya. Pero, vamos, estaba empezando a comprender.- Me encariñe a ti... .- Susurre para mi mismo, y luego tome en cuenta sus palabras.- Si, somos amigos... solo amigos... pero por eso mismo, quiero tu bien, quiero tu estabilidad.- No me gustaba estar serio, por lo que decidí volver a mi humor habitual.- Hey, y si vas a avisar a tu madre de que pasarás la noche fuera? No quiero aburrirme esta noche~ .-Sonreí, volviendo a caminar hacia donde se hallaba su campamento-.

No me agradaba nada la situacion incomoda de estar discutiendo cosas como aquellas, así que cerre mis ojos, suspire, mire al cielo y sonreí, afirmando con mi cabeza. Esta bien, ¿Pero que haremos? ~ Pregunte acercando hasta donde se encontraban mis familiares, y entre ellos, mi amada madre, que a pesar de envejecer con los años, su sonrisa seguía radiante y bella, eso me hacia sonreír. Me detuve esperando la respuesta de Francis.

Bueno... no lo sé, podemos hacer lo que desees, tenemos el resto de la noche, mi hogar, habitaciones, y todo el pueblo, con sus variados paisajes y lugares~ .-Sonreí, viendo como seguían todos iguales, excepto por las arrugas y algunas canas. Tocaban sus guitarras, cantaban y bailaban al rededor de la fogata.- Pues, si no quieres no importa... Se nota que no te puedes aburrir con esto todas las noches~ .-Reí, mientras sentía unos aplausos.

Sonreí amplio por el comentario, la verdad tenía razón, todo aquí siempre era muy alegre, pero al final siempre terminaba solo en la laguna con mi guitarra. No, esta bien, quiero ir contigo. Corrí hasta donde se encontraba mi madre, comentándole al oído mis planes, mirando aveces de reojo a Francis, mi madre solo se limito a sonreír y asentir con su cabeza, me dio un beso en la sien y partí con el rubio. Debe ser aburrido vivir solo, osea...debe ser genial tener tanta independencia, pero por otro lado es un tanto triste...¿Que piensas? Miré sus ojos azules...otra vez, sí...era como un hechizo

Vi como se dirigía a su madre tal cual cuando tenía 8 años, Antonio no cambiaba, y esperaba que no cambiará nunca. Luego vi que ella me miraba, si, ella sabía lo que yo era, pero también, por alguna extraña razón, sabía incluso mejor que yo, que no le haría daño a su hijo. Me di cuenta de que el moreno venía de vuelta luego de unos segundos mirándome fijamente con su madre. Y luego partimos a mi mansión.

En realidad, es como una pesadilla, lo odio en demasía... Pero es por mi bien, además, ya me acostumbré... .-Le sonreí al gitano que se hallaba a mi lado, sabía que él también solía sentirse solo como yo, pero... mi caso era particular, ya que eh estado toda mi vida solo.- Y bueno, se te ocurrió que haremos? O si gustas puedes llegar a dormir a mi cama, yo estaré despierto un buen rato... .-Por no decir toda la noche.

Vaya... Susurre, La verdad no tengo claro que podemos hacer, tengo ganas de tomar alcohol,pero hace mucho frió aquí, así que vayamos a tu casa Sonreí posando mis ojos en sus cabellos rubios que brotaban con naturalidad, ondulándose en las puntas....De verdad puedo dormir en tu cama? Reí bajito Es enorme ...

Tengo varios vinos, y pondré la chimenea si tienes frío, además de que puedo prestarte algún abrigo o algo así... -Acaricie sus cabellos castaños, para luego quitar mi mano y ver mi reloj.- Tenemos unas horas antes de que amanezca~ .

Luego oí el comentario de mi cama, siempre había tenido camas de ese estilo y eran solo de adorno, ya que como no dormía, las hacia y deshacía por mero ocio.- Pues Claro, eso sí es la única hecha en la mansión, las demás están con las sabanas sin cambiar hace mucho... debo conseguir servidumbre ~ .-Reí, notando que nos acercábamos a la reja de entrada a mi propiedad.- Adelante, señor Antonio, ahora usted es un invitado mio y debo atenderle en todos sus caprichos~ .-Bromee mientras le hacia una reverencia luego de abrir la reja de la entrada-.

Muchas Gracias señor Francis ~ Sonreí bromeando con aquellas palabras tan educadas.
No era la primera vez que visitaba la mansión de Francis, pero siempre me sorprendia la magnitud de esta, y sobretodo su hermosa estructura, me fascinaba.
Gracias por las continuas invitaciones, es muy agradable pasar ratos contigo....Fran Si, lo llame con aquella simpatica abreviacion de su nombre. Entramos en la casa, donde la temperatura parecia ser muy baja.
¿No te congelas aquí? Reí abrazandome a mi mismo.

Muchas gracias, es un gusto que le agrade pasar un rato conmigo~ .-Le guiñe el ojo mientras me dirigía a la chimenea.- Nunca e necesitado el calor de esta chimenea~ es la costumbre creo... -Volví a mentir, pero finalmente vivía de mentiras, ya que era mejor decir eso a: Es que como soy un vampiro no siento temperaturas, y soy un cadáver, por eso estoy siempre tan frió ~. Prendí la chimenea, la cual se encargaba de calentar toda la casa.- Ahora te paso un abrigo, sino te congelarás y no quiero tener que enterrarte en el patio trasero~ .-Bromee, aunque de todos modos, no enterraría en mi patio algún cuerpo, era más divertido cuando los encontraban y investigaban el porque de las muertes. Abracé a Antonio y traté de darle un poco de calor con mis ropas, para luego sacarme la chaqueta y dársela.- Quieres beber acá o en mi cuarto? .-Di unos pasos en dirección a la cocina, para ir en busca del vino.